Hablar de Valentino Rossi es hacerlo de una leyenda del motociclismo y del deporte. Una leyenda viviente que sigue compitiendo al máximo nivel con 40 años de edad, cumplidos este 16 de febrero, solo unos días después que yo. Aunque a mí aún me quedan su número de mundiales para llegar a esa cifra jejeje.
Pero no estamos aquí para hablar de sus éxitos deportivos y de su carrera infinita. De sus ganas insaciables de competir contra rivales a los que casi dobla en edad. O de si será capaz de ganar el 10º título mundial frente a un Marc Márquez que parece invencible ahora mismo. De lo que vamos a hablar es de su imagen en el deporte, de su figura mediática dentro y, sobre todo, fuera de la pista.
Porque el caso de Valentino es un caso muy especial en el deporte. Sí, hay muchos otros deportistas especiales y únicos de los que también iré hablando en el blog. Pero empezar con Valentino Rossi me parece una elección muy acertada. Y es que es un deportista que marca un antes y un después en su deporte, que también ha sido una gran influencia para otras competiciones y deportistas.
¿Quién no recuerda sus locas celebraciones cuando ganaba una carrera? Un día se disfrazaba de Robin Hood, otro día paraba en medio de la pista para ir al baño. En otra ocasión se paseaba con un pollo gigante subido en su moto y hasta se atrevía con una muñeca hinchable (la que se liaría ahora mismo si a alguien se le ocurre hacer una celebración así podría ser épica XD).
Y por supuesto, las celebraciones de sus títulos mundiales.
Con su llegada al Mundial, de pronto teníamos a un jovencísimo italiano que cuando ganaba no se limitaba a pasear la bandera de su país por la pista y alzar los brazos a su llegada a la zona del podio. Cuando ganaba había fiesta, había espectáculo y había show.
VALENTINO ROSSI Y ALGUNAS DE SUS LOCAS Y DIVERTIDAS CELEBRACIONES:
Está claro que sus celebraciones excéntricas y un poco locas y polémicas no iban a gustar a todo el mundo. Pero también está claro que no iban a dejar indiferente a nadie. Había expectación entre los aficionados por ver cuál sería su próxima celebración, cuál sería su nuevo show.
Rossi se divertía con ello, mostraba su sentido del humor (un rasgo clave de su personalidad, como veremos en la parte 2) y ofrecía algo distinto y único a los fans. Y lo cierto es que a la gran mayoría les encantaba.
Además de esto, Valentino Rossi llegó al Mundial con un casco que rápidamente se convirtió en una de sus grandes señas de identidad: el sol y la luna. El casco es el elemento clave en la diferenciación visual de un piloto respecto a sus rivales en la pista, junto al color y el número. Valentino ha combinado estos tres elementos de forma fantástica.
El diseño del casco lo hacía ver diferente a los demás pilotos. El sol y la luna lo han acompañado a lo largo de toda su carrera, a excepción de los GP de casa, en los que siempre ha llevado un diseño especial y único para la ocasión (junto a los test de invierno y algún que otro GP puntual).
Cada año, cuando llega Mugello y Misano, Rossi presenta un casco nuevo que solo utilizará en ese Gran Premio. Es una tradición de cada temporada que también despierta expectación entre los fans y le añade un toque especial al GP. Además de suponer un plus muy atractivo para la imagen y marca personal del piloto.
Luego llegó el color amarillo que hizo suyo, no solo por la mítica Nastro Azzurro de sus primeros años en la categoría reina. Sino también por llevarlo en el casco, mono o número.
Y por último, el eterno 46: un número con una bonita historia detrás, a la vez que misteriosa, y que no quiso dejar de llevar aunque ganara el campeonato.
VALENTINO ROSSI Y TODOS SUS CASCOS (Y MOTOS) DE 1996 A 2017:
Parte II
Que Valentino Rossi ha marcado un antes y un después en MotoGP es algo obvio, tanto dentro como fuera de la pista. Él ha sido el rey de la marca personal en el motociclismo: no ha habido un piloto con ese poder de atracción en los fans, con tal “boom” mediático, y con un merchandising y marketing como el suyo.
Hasta ahora, hablábamos sobre su imagen dentro del asfalto, cuando el piloto está compitiendo. Porque sí, también hay aspectos dentro del terreno de juego o la pista que son claves en la imagen y la marca personal del deportista. En este caso, veíamos sus celebraciones y su atuendo o uniforme. Pero nos faltaba hablar sobre la figura del deportista cuando no está peleando por ganar un partido o ganar una carrera.
Aquí es dónde se hace aún más grande la figura del doctor más famoso que alguna vez se subió en una moto. Porque si Valentino Rossi es lo que es en el deporte, no lo es solo por sus títulos y victorias o por sus adelantamientos increíbles (que también, por supuestísimo). Sino también por su personalidad y carácter, su imagen y forma de ser, y su relación y atención con los fans.
Está claro que no todas las personas tienen esa capacidad de ser extrovertidas, dejando la timidez o la vergüenza a un lado. Pero Rossi no es solamente alguien extrovertido y que se muestra al público tal como es. También desprende una alegría y buen rollo que lo hacen diferente.
ROSSI Y SU PERSONALIDAD ALEGRE Y BROMISTA EN EL PADDOCK:
Siempre con una sonrisa en la cara, siempre dispuesto a hacer broma y divertirse. Valentino es feliz haciendo lo que hace y lo transmite SIEMPRE. Cuando está subido en la moto y cuando está atendiendo a los fans o a los medios. Tiene un gran carisma y esto ha hecho que su figura como deportista sea más grande, más allá del palmarés y los títulos conseguidos.
Además, siempre está pendiente de los aficionados y entiende que ellos son los que dan sentido a todo esto. Si ellos no fueran al circuito y no les interesaran las carreras, no podría dedicarse a lo que hace, a su gran pasión. Podría hacerlo claro, pero tan solo como hobby.
Cuando le enfoca la cámara en el garaje, ahí está Valentino dedicando algún gesto simpático al público. Si pinchan su on board en la vuelta de formación y lo ve, manda un pequeño saludo. Son detalles que suman y dejan ver la manera de entender el deporte que tiene un deportista como él.
Valentino Rossi es uno de los mejores ejemplos de imagen y marca personal en el mundo del deporte. Un piloto especial que ha dejado huella en los circuitos y también fuera de ellos. Un modelo a seguir de lo que debe ser la comunicación e imagen del deportista y su marca personal.
Su rivalidad con Marc Márquez y lo que ocurrió en Malasia 2015 le hizo ganarse muchos detractores y críticos, sobre todo aquí en España. Pero es algo que puede pasar en el deporte, la competición a veces es así.
De una forma u otra, seas fan de Valentino o no, te guste más o te guste menos, el vacío que dejará en MotoGP cuando se vaya será enorme.
Porque Rossi solo hay 1.
VALENTINO ROSSI Y ALGUNOS DE LOS MEJORES MOMENTOS DE SU CARRERA:
Imagen tomada de Motorbike Magazine.